COMPARSA
"CORAZÓN DE TRAPO EN LA CIUDAD DE ASFALTO"
PREMIO ESTIMULOS A LA CREACIÓN 2008
OTORGADO POR:
EL INSTITUTO DISTRITAL DE PATRIMONIO CULTURAL
MONTAJE SELECCIONADO COMO
MEJOR COMPARSA DISTRITAL DEL DESFILE DE NIÑOS Y NIÑAS 2008
En la ciudad del asfalto se alzan imponentes los niños que con sus muñecas y juguetes le cantan a Bogotá, vienen animados en compañía de Pinocho que a estas alturas de la vida tendrá su nariz a 2600 metros mas cerca de las estrellas y de Gepetto que con su infaltable amor por los niños le sobra en pedagogía para enseñarnos a amar nuestra ciudad como el amaba a su juguete de madera, le cantamos al sol y a la luna lunera cascabelera con nuestro corazón de juguete, corazón de trapo que nos da la posibilidad de amar sin el amasijo de cuerdas y tendones que nos hace confundir y amar a veces cosas banales.
Los abuelos de esta inmensa ciudad cuentan que había muchísimos juegos, solamente que unos se jugaban de día y otros en la noche, porque era más emocionante; como esconder el cinturón o rejito quemado, las escondidas, listones de colores, yermis, arremacho éstos eran los que se jugaban en la noche y los de la tarde: cauchito, golosa, semana, jazz, el tarrito o las canicas y el trompo o cinco huecos. Pero lo que más les encanta recordar es que no ocupaban ningún juguete costoso salvo la pelota y las canicas; así como reatas, eran niños felices y además no había dinero para invertir en esas cosas. Quizá eso les hacía tener unidad en la familia; además cuentan que no había televisión que tanto distrae a los niños y que en la noche a la hora de la cena sus papás aprovechaban en contarles cuentos, esta es una de las más hermosas tradiciones que se han perdido.
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